No se ustedes, pero amo los brunches. Siento que tengo un free pass para comer todo, sin orden específico, mezclar mimosa con capuccino, croissants con ¿ensalada?
Pero lo que más me emociona -obvio- es poner una mesa muy espectacular. Pienso en una mesa que transicione durante todos los tiempos del Brunch.
Como soy una intensa, loca con delirio de hotelera, me gusta servir una barra grandiosa, como si fuera un hotelito escondido en la Riviera Francesa.
- Empiezo con fruta, amo los frutos rojos y los higos acomodada muy lindo en pequeños bowls.
- Yogurt, y granola hecha en casa.
- Amo poner variedad de nueces y semillas en recipientes pequeños.
- Sigo con pan dulce, conchas, pain au chocolat, croissants. Si me quiero lucir mucho, hago mi panqué de plátano (pronto les pasaré la receta).
- Bresaola con aceite de oliva, unas gotas de limón y parmesano al centro.
- Después sigue un revuelto de salmón ahumado con queso crema, cebollín y alcaparras. Uff, es el favorito de mis hijas. Es demasiado gozo.
- Ensalada griega. La amo. Bye.
- Tabla de quesos con panes tostados y mermeladas hechas en casa.
- Pan francés con challah (también les voy a pasar la receta porque es una delicia).
- Termino con platitos de galletas, polvorones, bombones cubiertos de chocolate.
O sea, como puedes ver, mi plan es empezar a las 11 y terminar a las 6. El chiste del brunch es empezar de a poquitos y seguir, y seguir, y seguir.
Para tomar, sirvo de todo, porque el chiste es transicionar. Esto lo pongo en una mesita de apoyo o al final de mi barra.
Me encanta servir muchas jarritas de diferentes tamaños con las bebidas que me gustan:
- Leche de vaca, almendra, coco
- Aguas frescas
- Jugo de alguna fruta local (mandarina, maracuya, piña con gengibre)
- Café en todas sus versiones
- Té herbal
- Mimosas con jugo natural
Decoro mi buffet con todo tipo de accesorios y cosas que me encuentro. Pongo los platillos en desniveles para que la mesa tenga movimiento y se vea armónica. Pongo velas, floreros, pájaros y chacharas que me encuentro. Porque siempre hay chance de contar historias con estas cosas.
Y ahora la mesa:
Entonces: tiene que ser cómoda, que transicione varias servidas y que dure hoooras bonita.
Un mantel lindo y primaveral, el blossom rosa lo amo sin control. Es importante usar bajoplato porque así no se ve vacío el lugar. Y aquí es donde hago layering, que no es más que poner capas de platos para que conforme los uses, se puedan retirar y uses el de abajo.
El orden es: bajoplato, trinche, plato de ensalada, bowl pequeño y plato de pan del lado izquierdo.
Flores al centro de la mesa, muy casual la cosa. Nada elegante, nada sobrepuesto. El brunch es classy pero no stuffy. El chiste es disfrutar, comer, tomar drinks coquetos y platicar y reír sin fin.
Por último, buena música. Chill, relajado pero muy cool. Checa los playlists de ZASH. El de Cuerna Weekend siento que ¡es ideal!
¿Lista para salir a disfrutar de tu brunch de primavera?
#ZASHITUP
